Diagnóstico – Puedes comenzar si consultas a tu proveedor de atención primaria para averiguar si tu ansiedad podría estar relacionada con tu salud física. El especialista puede buscar signos de una afección médica de base que pueda requerir tratamiento.
Sin embargo, es posible que debas consultar a un especialista en salud mental si sufres ansiedad intensa. Un psiquiatra es un médico que se especializa en el diagnóstico y el tratamiento de afecciones de la salud mental.
Un psicólogo y otros profesionales de la salud mental pueden diagnosticar la ansiedad y brindar asesoramiento (psicoterapia). Para diagnosticar un trastorno de ansiedad, tu proveedor de salud mental puede:
- Realizarte un examen psicológico. Esto implica hablar sobre tus pensamientos, sentimientos y comportamientos para ayudar a identificar un diagnóstico y detectar las complicaciones relacionadas. Los trastornos de ansiedad a menudo se producen junto con otros problemas de salud mental, como la depresión o el abuso de sustancias, lo que puede complicar la determinación del diagnóstico.
- Compara tus síntomas con los criterios del DSM-5. Muchos médicos utilizan los criterios del Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, DSM-5), publicado por American Psychiatric Association (Asociación Estadounidense de Psiquiatría), para diagnosticar un trastorno de ansiedad.
¿Cuándo se debe acudir a un médico por ansiedad?
¿Dónde buscar ayuda si tengo ansiedad?
¿Que decirle al médico cuando tienes ansiedad?
¿Qué hará mi médico por mí? – Es posible que no se sienta cómodo al hablar con su médico sobre cualquier problema mental o emocional que tenga. Pero su doctor puede ayudarlo. Puede:
- hacerle preguntas sobre sus pensamientos y sentimientos, que podrían ayudarlo a comprender mejor por lo que está pasando;
- asegurarle que no está «loco» sino que tiene un problema médico;
- le dirá qué tipos de apoyo están disponibles, como la terapia;
- ofrecerle medicamentos, si corresponde;
- recomendarle cambios en el estilo de vida que puedan ayudar a mejorar su salud mental, como el ejercicio;
- referirlo a un especialista, si piensa que esto sería más útil;
- verlo en las citas de seguimiento para supervisar cómo le va y cómo responde al tratamiento.
El camino hacia una mejor salud A veces puede ser difícil iniciar una conversación con su médico sobre su salud mental. Estos son algunos consejos que pueden ayudarlo antes, durante y después de su cita. Antes de su cita:
- Establezca metas razonables para la cita. Diagnosticar y tratar enfermedades mentales lleva tiempo. Si establece el objetivo de que sus síntomas desaparezcan de inmediato, es probable que se sienta decepcionado. En cambio, establezca algunos objetivos razonables. Estos podrían incluir explicarle sus síntomas a su médico, conocer un posible diagnóstico y elaborar un plan de tratamiento.
- Anote la información importante. Tómese un tiempo antes de su cita para escribir sobre lo que le gustaría hablar. Esto lo ayudará a asegurarse de no olvidar nada cuando esté en el consultorio del médico. Algunas cosas que puede escribir incluyen:
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- Sus síntomas. Estos pueden ser cambios físicos, mentales, emocionales o de comportamiento que haya notado en su vida.
- Cómo su estado de ánimo afecta su vida cotidiana.
- Información personal clave, como eventos traumáticos en su pasado o situaciones estresantes que enfrenta actualmente.
- Su información médica, como otras afecciones físicas o mentales que tiene en este momento. También anote todos los medicamentos que esté tomando, incluidos los medicamentos de venta libre y los suplementos de hierbas.
- Preguntas para hacerle a su médico.
Durante su cita:
- Indique sus preocupaciones claramente. Es importante que le diga a su médico todos sus síntomas. Pero, antes de llegar a eso, dígale lo que cree que puede estar mal. Use frases claras como «Creo que puedo estar deprimido» o «Tengo problemas con la ansiedad». Esto ayudará a guiarlos y les permitirá saber en qué dirección ir.
- Sea lo más abierto y honesto posible con su médico. Ellos no pueden ayudarlo si no saben todo lo que está sucediendo. Puede ser difícil expresar sus sentimientos, especialmente con alguien que no conoce muy bien. Pero su médico está capacitado para tratar problemas delicados. Será comprensivo y profesional, y no le dirá nada que no haya escuchado antes.
- Consulte sus notas. Es común olvidar la mitad de lo que iba a decir una vez que llega al consultorio. Por eso es importante escribir las cosas de antemano. Si usa las notas que ha preparado con anticipación, no tendrá que preocuparse por olvidar detalles importantes.
- Comprender el proceso de diagnóstico. No existe una tomografía ni un análisis de sangre que pueda indicarle si tiene depresión, ansiedad, trastorno bipolar u otra enfermedad mental. A veces, puede ser difícil para su médico poder ponerle un nombre a la afección específica que tiene. Además, la causa de sus síntomas puede ser una combinación de afecciones.
- Por ejemplo, la depresión y la ansiedad a menudo suceden juntas;
- El trastorno bipolar comparte algunos síntomas con la depresión;
- Y las enfermedades depresivas a menudo suceden con afecciones físicas como enfermedades cardíacas, diabetes o cáncer;
Es posible que su médico le haga preguntas que parecen no estar relacionadas con una enfermedad mental. Todo esto es un esfuerzo para asegurarse de que reciba el diagnóstico correcto.
- Lleve a alguien con usted. Si necesita ayuda, invite a un amigo o familiar para que vaya a su cita con usted. Pueden ayudarlo a comprender y recordar lo que le dice el médico. También pueden informarle al médico sobre los cambios que notaron en usted.
Después de su cita
- Seguir con un tratamiento. Después de que haya compartido sus inquietudes y su médico haya dado su diagnóstico, juntos elaborarán un plan de tratamiento. Esto puede incluir terapia de conversación, medicamentos, cambios en el estilo de vida o una referencia a un especialista. Es su trabajo seguir con el tratamiento.
- Haga un seguimiento con su médico. Su médico querrá volver a verlo en unas pocas semanas para ver si el tratamiento está funcionando. Es importante que programe una visita de seguimiento y vaya a la cita, ya sea que se sienta mejor o no. Si no se siente mejor, su médico puede tener otras ideas sobre cómo tratarlo.
- Sea paciente. Es importante que sea paciente consigo mismo y con su médico cuando atraviese este proceso. Es posible que tenga que probar diferentes medicamentos o una combinación de medicamentos. Es posible que necesite terapia de conversación y una combinación de estrategias de autocuidado.
Programe citas con un especialista o un terapeuta. Haga llenar su receta y tome el medicamento según las indicaciones. Intente los cambios en el estilo de vida aunque no tenga ganas. Esto podría incluir cambiar su medicamento, agregar otro medicamento o recomendar otros cursos de acción.
Puede llevar tiempo encontrar el plan de tratamiento adecuado para usted. Simplemente no se rinda. Se sentirá mejor mientras siga intentando encontrar una solución.
¿Cómo saber si lo que tengo es ansiedad?
¿Por qué me da tanta ansiedad?
– La ansiedad es una emoción humana normal, al igual que la alegría, la sorpresa y el miedo. Entre las razones comunes para la ansiedad, se incluyen:
- la presión social,
- el trabajo, el estudio o el estrés relacionado con cumplir con fechas límite
- dificultades financieras
- problemas en las relaciones
- problemas de salud
- problemas sociales y problemas en casa
- el trauma debido al racismo o prejuicios de género
- abuso y negligencia
Algunas formas de manejar la ansiedad incluyen:
- identificar qué es lo que la provoca
- reconocer los síntomas iniciales
- usar estrategias para hacerle frente y prevenirla o navegar por ella
Algunas personas tienen el trastorno de ansiedad generalizada, una afección que implica sentirse constantemente preocupado por distintas cosas. Esto puede hacer difícil la realización de las tareas diarias.
¿Qué pasa si no se cura la ansiedad?
Si el estado de ansiedad se agrava, se puede sufrir una crisis de angustia, en la que los síntomas se acentúan, llegando incluso a pensar que se va a morir.
¿Que no hacer a una persona con ansiedad?
¿Cómo quitar la ansiedad de una vez por todas?
¿Qué tan grave es el trastorno de ansiedad?
– Uno de los síntomas más comunes de un trastorno de ansiedad es la preocupación excesiva. La preocupación asociada con los trastornos de ansiedad es desproporcionada respecto a los eventos que la desencadenan y suele ocurrir como respuesta a situaciones normales y cotidianas.
- Para ser considerada una señal de trastorno de ansiedad generalizada, la preocupación debe estar presente la mayoría de los días por al menos seis meses y ser difícil de controlar;
- La preocupación también debe ser grave e intrusiva, afectando la habilidad de concentrarse y realizar las tareas diarias;
Las personas menores de 65 años tienen mayor riesgo de desarrollar el trastorno de ansiedad generalizada, especialmente los solteros, con un nivel socioeconómico más bajo y con muchos factores estresantes en su vida. resumen La preocupación excesiva por las cosas cotidianas es una característica distintiva del trastorno de ansiedad generalizada, especialmente si es lo suficientemente grave como para interferir con la vida diaria y se presenta casi a diario durante al menos seis meses.
¿Qué pasa en el cerebro de las personas con ansiedad?
La Amígdala – Es el órgano ejecutivo de la ansiedad y el miedo. La amígdala es muy rápida y automática. Analiza todos los estímulos que podrían ser causa de peligro. La amígdala envía la señal de alarma inicial y su conexión con la Sustancia Gris PeriAcueductal (SGPA ) provoca una sensación de miedo intensa, alerta, huida y paralización.
¿Dónde buscar ayuda?
¿Cuándo buscar ayuda?
una dificultad personal, como la ansiedad o malestar, una situación dolorosa, como una enfermedad, duelo, trauma o separación, dificultades relacionales, como problemas de pareja, problemas en la familia, o en el trabajo, o bien un deseo de cambio o de trabajo en sí mismo.
¿Dónde buscar ayuda depresión?
¿Dónde conseguir ayuda en caso de depresión?
Durante la pandemia de COVID-19, la línea telefónica Línea de la Vida 800 911 2000 ha constituido un mecanismo para brindar apoyo emocional a las personas que lo requieren y recibir un tratamiento adecuado, específicamente para quienes padecen depresión. En un tema de depresión, es recomendable realizar tareas programadas, establecer horarios para dormir y despertar, así como de alimentación. Además, actividades lúdicas, ejercicio y mantener el contacto con amigos y familiares a través de diferentes tecnologías. La Secretaría de Salud, a través de los Servicios de Atención Psiquiátrica (SAP), la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic) y la secretaria técnica del Consejo Nacional de Salud Mental (STConsame) realizan esfuerzos conjuntos para que se impulse un cambio de enfoque para atender la salud emocional y la depresión, con acciones para fomentar la autoestima y la autovaloración, con base en cuatro ejes estratégicos: educación, bienestar, cultura y comunicación.
En el eje de salud hay componentes de prevención, atención y rehabilitación especializados en materia de salud mental y adicciones. La depresión se reconoce como una “condición médica o cerebral y un trastorno, más que una cuestión de voluntad”.
Los focos de alarma para sospechar que alguien padece depresión es que por lo menos durante dos semanas la persona presente tristeza y anhedonia, es decir, que pierde el interés en realizar actividades que anteriormente eran placenteras o llamaban su atención.
- Otros síntomas cognitivos se asocian a la percepción que se tiene de uno mismo, de las personas que se encuentran alrededor, del mundo o del futuro, ya que solo se consideran cosas y experiencias negativas y se tiene un panorama de desesperanza;
También se pueden presentar síntomas físicos como menor energía, falta de concentración, alteraciones de sueño y del apetito que se puede ver reflejado en la variación del peso corporal durante el último mes. Las personas adultas mayores manifiestan irritabilidad y cambios súbitos de ánimo, y las y los niños menores de ocho años presentan dolores de estómago o cabeza, mareos y nauseas.
El síntoma más grave, es la existencia de ideas suicidas. El trastorno depresivo mayor se caracteriza porque la persona no se levanta, no se baña, no quiere socializar, se aísla y empieza a tener ideas de muerte o hasta alucinaciones.
Si es recurrente, de difícil tratamiento o resistente a éste se puede convertir en una enfermedad discapacitante. En algunos casos, la depresión se puede remitir o curar como tal y en otros solo se controla, por lo que es fundamental la valoración adecuada, y que el tratamiento depende del nivel de gravedad.
- Las personas con comorbilidades son más proclives a padecer depresión, pues el estado proinflamatorio de enfermedades como diabetes o hipertensión, combinado con estrés alteran las características circulatorias, endócrinas o metabólicas que hacen que la sangre, lípidos, glucosa u hormonas se liberen de manera diferente;
Asimismo, la depresión también incrementa la posibilidad de desarrollar diabetes o problemas circulatorios. Las personas que se sientan estresadas, tristes o con alguna alteración emocional, no deben esperar a que el problema avance, pueden recibir apoyo emocional u orientación en la Línea de la Vida al 800 911 2000 o consultar el sitio web de coronavirus en https://coronavirus. Comisión Nacional contra las Adicciones Centros de Integración Juvenil Síguenos en Twitter: @SSalud_mx Facebook: facebook. com/SecretariadeSaludMX Instagram: ssalud_mx Youtube: Secretaría de Salud México.