¿Cómo se cura una fístula perianal? – Cuando la fístula perianal está causada por la Enfermedad de Crohn, la lesión se trata con antibióticos, inmunosupresores, antiinflamatorios, analgésicos o los medicamentos que indique el facultativo. También se recomienda una hidratación suficiente y el consumo de fibra en la dieta diaria.
En este caso, la intervención quirúrgica pasa a ser la última opción. El tratamiento paliativo de las molestias causadas por fístulas perianales, puede ser el mismo que se usa para tratar las hemorroides , aunque va a depender de la gravedad de la lesión.
El único tratamiento capaz de eliminar una fístula perianal completamente es la intervención quirúrgica. Una vez que desaparece la fístula, desaparecen también las molestias que ella generaba: dolor, secreciones, inflamación, sangramiento, etc. .
¿Qué médico ve el fístula?
¿Qué es una fístula? Una fístula de ano es un trayecto, un túnel que comunica el interior del ano con la piel exterior. Es decir, una comunicación entre dos superficies epiteliales. Dentro de la patología benigna anal, la fístula es sin duda la más compleja y difícil de tratar. Se originan por la infección de unas glándulas que tenemos en el ano, encargadas de lubricar el canal anal. El porqué de esta infección no esta claro, pero sabemos que cualquier herida (fisura anal) o traumatismo en la mucosa anal (diarreas) pueden favorecer su aparición. ¿Cómo reconocer una fístula? En la fase aguda , un paciente previamente asintomático debuta con un dolor en la región anal, intenso , progresivo que no responde a calmantes. Con frecuencia aparece fiebre o escalofríos. Suele verse en los márgenes del ano una inflamación, roja, caliente y muy dolorosa a la presión. Puede drenar de forma espontánea, saliendo abundante contenido entre pus y sangre que alivian rápidamente al paciente.
- ¿Por qué salen las fístulas? Manifestación clínica;
- Si lo identifica a tiempo y acude a la consulta se lo podemos drenar de forma ambulante bajo anestesia local con inmediata mejoría;
- En la fase crónica , el paciente refiere una lesión semejante a un grano común en el margen del ano que periódicamente le molesta y supura;
Pueden pasar días o semanas sin que se manifieste sin que ello suponga la curación de la fístula. ¿Cómo se diagnostica una fístula? Para fístulas sencillas , no operadas previamente basta con la exploración de un proctólogo experimentado en consulta. Una buena historia clínica, inspección, tacto rectal y una rectoscopia son suficientes. Para fístulas complejas o previamente operadas y recidivadas, además de la valoración por el proctólogo, son muy recomendables estas exploraciones complementarias:
- Ecografía endoanal 360º : permite valorar el trayecto en su totalidad y sobre todo valorar si existen lesiones previas yatrogénicas en el complejo esfinteriano. Es decir, si el paciente ya perdió continencia en cirugías anteriores.
- Resonancia Magnética Nuclear con “coil endoanal” : Igual que la ecografía sólo que es difícil encontrar donde la hagan en España.
- Manometría anal : permite cuantificar de forma objetiva la fuerza que son capaces de realizar los esfínteres.
Tipos de fístulas y su clasificación En el ano tenemos dos músculos que se encargan de la continencia: los esfínteres anales (interno y externo voluntario). Rodean como un anillo dentro de otro el canal anal y son los responsables de seamos capaces de decidir dónde y cuando realizamos nuestras deposiciones. En función de la longitud y de la profundidad del trayecto fistuloso podemos clasificarlas de más sencillas a más complejas:
- Fístula subcutánea : el trayecto pasa por debajo de la piel. NO compromete el esfínter.
- Fístula interesfinteriana : el trayecto diseca el espacio que hay entre los dos músculos.
- Fístula transesfinterianal baja : el trayecto afecta menos de un 50% del esfínter.
- Fístula transesfinterianal alta : afecta a mas del 50% del esfínter.
- Fístula supra esfinteriana : variedad más compleja y rara de todas. El trayecto abarca por completo al complejo esfinteriano, e incluso pasa por «encima», afectando al músculo elevador del ano.
- Fístula recto vaginal : generalmente en relación con un parto complejo ( accidente obstétrico) o una cirugía previa oncológica / tumoral. Se produce una comunicación entre el recto y la vagina.
Dividimos las fístulas en «sencillas» o «complejas». Las tres primeras serían sencillas, las tres últimas complejas. Además tiene importancia la localización de las mismas. Si afectan a la porción anterior del ano, es decir, aquella que se extiende hacia el perineo, peor. Tratamiento para las fístulas El tratamiento de la fístula siempre es quirúrgico y tiene dos objetivos principales: extirpar el trayecto preservando siempre los esfínteres del paciente.
Todas ellas indoloras. Debe evitarse a toda costa la exploración con sondas al paciente en consulta por las molestias que ello origina. Puede incluso ser contraproducente. Es decir, mantener la continencia intacta.
Ya decía Sir Alan Parks, cirujano inglés, pionero de la cirugía colorrectal: “Mas vale un enfermo con fístula y continente que un enfermo incontinente pero curado de su fístula”. El abordaje del cirujano siempre debe de ser conservador en relación con el esfínter. La complejidad del tratamiento y el tipo de anestesia van directamente relacionadas con el tipo de fístula que tiene el paciente. Bien es sabido por los cirujanos generales que hay fístulas muy complejas y difíciles de operar. Por ello es muy importante ponerse en manos de un especialista en proctología para evitar complicaciones posteriores.
En nuestra Unidad disponemos de los siguientes tratamientos. Fístulas que afectan menos del 50% del esfínter anal Láser de CO2 : Nuestro láser de CO2 de última generación permite extirpar el trayecto de la fístula minimizando el dolor postoperatorio.
La anestesia puede ser local, local y sedación ó regional en función de la profundidad del trayecto. Siempre con el paciente quirófano, monitorizado, con presencia de un anestesista por si surgiera cualquier complicación. La intervención no requiere preparación previa (enemas) y se realiza de forma ambulante. Fístulas complejas (más del 50% del esfínter afecto) o fístulas reproducidas (multioperadas)
- Setton : en aquellas fístulas en las que no se pueda extirpar la totalidad del trayecto por su relación con el esfínter o en aquellos casos en los que haya un componente inflamatorio agudo, dejamos pasado una banda de silicona elástica que se tensa de forma progresiva cada tres días, cerrando la fístula.
- Flap de avance : después de extirpar el trayecto fistuloso con el láser de CO2 hasta el plano esfinteriano, se realiza un auto injerto para cerrar el orificio interno evitando así la reaparición de la fístula.
- Técnica de LIFT ( Ligadura interesfinteriana de trayecto fistuloso). Consiste en seccionar, extirpar y ligar en trayecto fistuloso a través de un abordaje interesfinteriano para no afectar la funcionalidad del mismo.
- Pegamento biológico de fibrina Tisucol : este revolucionario tratamiento permite previa limpieza del trayecto obturar el mismo mediante la inyección indolora de fibrina de origen sintético. Permite una inmediata recuperación ya que no deja herida en la piel. Solo válido para fístulas de trayecto único y rectilíneo.
- Surgisis Anal Fístula Plug : se trata del último avance en bioprótesis para el tratamiento de fístulas. Una casa canadiense comercializa un tapón de colágeno para «sellar» el trayecto fistuloso sin necesidad de realizar una incisión quirúrgica ni afectar al esfínter anal. Se colocan bajo anestesia raquídea en quirófano. Como en el caso anterior, por desgracia NO SIRVE para todo tipo de fístulas.
- El dolor postoperatorio es mínimo y se controla con la toma de analgesia convencional;
- El paciente recibe el alta el mismo día de la intervención;
- Solo en aquellas transesfinterianas altas de trayecto único y recto;
Sin infección aguda.
¿Cuándo ir al médico por una fístula?
¿Qué pasa si una fístula No se trata?
Aclara todas tus dudas con una consulta en línea – ¿Necesitas el consejo de un especialista? Reserva una consulta en línea: recibirás todas las respuestas sin salir de casa. Mostrar especialistas ¿Cómo funciona? Un trayecto fistuloso es en sí un padecimiento benigno, no tendrá una fatalidad a causa de ello, sin embargo el NO INTERVENIRLO si puede derivar en la persistencia de los síntomas como descarga, humedad anal, aparación de nuevos abscesos e incluso la aparición de nuevos trayectos fistulosos comunicados o independientes del primero. Al ser este un problema mecánico o físico, lo adecuado es acercarse con un coloproctólogo certificado que le pueda orientar al respecto de la mejor opción para resolver el problema por medio de cirugía. Saludos! Hola que tal, bueno pues la complicacion mas habitual es que se presenten mas abscesos y que se formen trayectos fistulosos mas complejos y la cirugia sea mas cruenta, entre las complicaciones mas seria esta la infeccion de tejidos blandos extensa o gangrena de fournier, desgraciadamente la decidia del paciente es lo que favorece las complicaciones, atiendase pronto, no es una urgencia pero debe operarse, no pierda tiempo, las tecnicas actuales ofrecen buenos resultados y menos dolor del que suele pensar el paciente, saludos Se desarrollan fistulas mas complejas y nuevos abscesos y la necesidad de una cirugía mas complicada con la consecuente mayor tasa de complicaciones.
- Debe operarse lo mas pronto posible!! Generalmente, si se dejan sin tratamiento, las fístulas no suelen sanar;
- De no tratarse (y con el paso del tiempo) lo esperado que el paciente pudiera presentar alguna o varias de estas molestias: dolor, infección, inflamación, fiebre, malestar generalizado, mal olor, estreñimiento, salida de pus, etc;
La recomendación es que se atienda. Busque a su cirujano de confianza para que le ofrezca la mejor alternativa para usted. Saludos.
- Tengo una fístula anal y me estoy deteriorando he bajado mucho dé peso tiene que ver con estoy me duele el estómago como si trajese hambre
- Tengo una fístula anal y me estoy deteriorando he bajado mucho dé peso tiene que ver con estoy me duele el estómago como si trajese hambre
- Buena tarde,tengo tres fistulas y por las tres me sale eses cada que voy al baño pero también cuando no voy ala baño me sigue saliendo,pasado mañana me operan Que riesgos hay ? Es normal que tenga tres fistulas ?
- Hace 5 años me operaron de fistula perianal. Pero no se curo y a vuelto a salir y por decidía ya hace 2 años siento un como ducto que casi llega a mis testículos. Es peligroso. ? Ya que tengo bastante miedo de volverme a operar. Saludos y gracias de antemano
- Me apareció una bolita en el ano y ya reventó salió pus roja que pasa que tengo que hacer ahora es peligro eso
- Si la salud de mi hermana se esta deteriorando por la fistula vesicointestinal y tiene vih con carga viral alta y cd4 en 200 puede ser operada o aun asi no se puede operar.
- Me operaron de una fistula anal hace 1 mes el doctor me dijo que es normal q sangre la herida pero ahorita ya arrojo más sangre cuando evacuo con coágulos y siento como punzadas? Es normal eso?
- Hola. Ya tiene como 6 meses que a través del ano me sale una mucosidad semiamarillenta sin olor, acompañado a veces de comezón e inflamación, últimamente la mucosidad es diario. Me hice una colonoscopia en febrero y me detectaron un pólipo que me extrayeron no canceroso qué según eso me lo provocaba…
- Buenos días me operaron de la fístula perineal me dejaron la herida habierta ya tengo un mes y drena un poco verde pero no siento dolor y la herida está cerrando normal es normal el líquido verde
- Hola,,hace 7 años que me hicieron la cirugía con laser,,ahora ando con molestias y manchas de sangre, incluso pequeños coágulos,,,puede ser que vuelva a formarse una fistula después de 7años?
¿Cómo curar una fístula sin cirugía?
Dr. Sajonia-Coburgo – Las fístulas de ano desgraciadamente no se pueden curar sin una operación. Puede aplicarse un tratamiento médico a base de antibióticos y anti inflamatorios si se produce un absceso. Con esto conseguiremos «enfriar la infección». Incluso durante largos periondos de tiempo, pero no curarla de forma definitiva.
¿Que hacer antes de ir al proctólogo?
Visita proctológica: en qué consiste – La visita proctológica permite diagnosticar diversos trastornos de la zona anorrectal. La visita se divide en varias fases y no es dolorosa. Cuanto más relajado esté el paciente, menos molestias sentirá. Si el paciente está relajado, también será más fácil para el médico inspeccionar la zona y hacer un diagnóstico preciso.
En caso de problemas que puedan dificultar la continuación, por ejemplo en presencia de fisura aguda y dolorosa, el médico solo podrá realizar algunas fases de la visita. La exploración rectal se puede realizar en una fecha posterior, una vez que los síntomas se hayan resuelto.
Por lo tanto, invitamos a afrontar la visita al proctólogo con calma y sin miedo. En concreto, las 5 fases de la visita proctológica son:
- HISTORIAL : antes de iniciar la vista en sí, el médico realiza el historial médico con una entrevista en profundidad con el paciente. Durante esta fase, el especialista pregunta al paciente:
- la descripción de los síntomas y los trastornos que padece;
- cuándo aparecieron los síntomas y con qué frecuencia se producen;
- posibles factores hereditarios para problemas anorrectales ;
- información sobre posibles terapias o intervenciones quirúrgicas previas para su problema.
- OBSERVACIÓN : el especialista observa la zona perianal para identificar cualquier problema visible externamente. El especialista pide al paciente que se tumbe en la camilla, normalmente en la llamada posición de Sims. La posición de Sims consiste en que el paciente se gire sobre su lado izquierdo, doble las piernas sobre el abdomen y lleve los glúteos al borde de la camilla.
- PALPACIÓN : el especialista coloca un dedo sobre la zona perianal para comprobar su consistencia al tacto e identificar cualquier anomalía. Durante la observación y la palpación, el médico puede detectar problemas, como fisuras y hemorroides inflamadas, que pueden dificultar la continuación de la visita. En estos casos, el especialista suspenderá la inspección y la pospondrá para una etapa posterior.
- EXPLORACIÓN RECTAL : en esta fase, el médico introduce suavemente un dedo bien lubricado en el orificio anal. De este modo puede evaluar mejor cualquier patología y la capacidad de contraer y relajar los músculos del esfínter. Para ello, el médico puede pedir al paciente que contraiga la zona anorrectal como si estuviera evacuando. En caso de síntomas relacionados con problemas de los esfínteres, el especialista puede requerir otras pruebas, como manometría anorrectal y ecografía transanal.
- RECTOSCOPIA Y ANOSCOPIA : la última fase de la visita puede consistir en la inspección del canal anorrectal con la ayuda de un anoscopio y un rectoscopio. Con estos instrumentos, el proctólogo puede inspeccionar el canal anal ( anoscopia ) y la parte baja del recto ( rectoscopia ). En esta fase, el especialista también puede realizar biopsias o pequeños tratamientos ambulatorios. Gracias a la anoscopia es posible comprobar la presencia de hemorroides internas y el estadio de la enfermedad.
El médico realiza una primera inspección no invasiva e identifica los problemas visibles en la piel externa. Tras la fase de observación y en función de los síntomas del paciente, el especialista evalúa si es posible proceder con las fases siguientes.
La rectoscopia permite comprobar la presencia de tumores del recto inferior. Para el diagnóstico de lesiones precancerosas del ano y de la parte inferior del recto también se dispone de un examen llamado Anoscopia de Alta Resolución (HRA). Este examen permite ver con precisión las lesiones y realizar posibles biopsias.
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¿Cómo vivir con una fístula?
Postoperatorio de la fístula anal – Después de la cirugía de la fístula, se recomienda al paciente tomar baños con agua tibia, así como tomar ablandadores de heces o laxantes durante una semana. Normalmente también se recetarán medicamentos para el dolor por la intervención quirúrgica.
¿Qué tan grave es tener una fístula?
Fístula colónica – Las fístulas colónicas pueden causar complicaciones como:
- problemas con el equilibrio de líquidos y electrolitos en el organismo, como deshidratación o bajas concentraciones de ciertos electrolitos
- desnutrición
- infecciones, como infecciones del conducto urinario
- peritonitis, una inflamación del revestimiento de la cavidad abdominal
- abscesos, que son áreas llenas de pus dolorosas e inflamadas, causados por infecciones
- septicemia , una enfermedad grave que se presenta cuando el organismo tiene una abrumadora respuesta del sistema inmunitario a una infección
¿Cuánto tiempo se puede estar con una fístula?
La técnica utilizada en la intervención – Si se realiza una fistulotomía, en una semana podrá estar llevando una vida normal y la herida quirúrgica cicatrizará en 4-5 semanas. En el caso de intervención de fistula anal mediante la técnica de fistulectomía la recuperación puede prolongarse más en el tiempo porque la herida quirúrgica es mayor.
¿Por qué se da la fístula perianal?
Descripción general – Una fístula anal es el término médico para un túnel infectado que se desarrolla entre la piel y la abertura muscular al final del tubo digestivo (ano). La mayoría de las fistulas anales son el resultado de una infección que comienza en la glándula anal.
Esta infección causa un absceso que drena espontáneamente o debe drenarse quirúrgicamente a través de la piel cerca del ano. Luego, la fístula forma un túnel bajo la piel y se conecta con la glándula infectada.
Generalmente es necesario realizar una cirugía para tratar una fístula anal.
¿Cómo es el dolor de una fístula?
Algunas personas con enfermedad inflamatoria intestinal pueden desarrollar una fístula pero, ¿qué es una fístula? La fístula es un canal, túnel o pasadizo anormal que conecta un canal interno a otro, o a la superficie exterior del cuerpo. Puede aparecer en cualquier parte del cuerpo aunque muchas de ellas comprometen el intestino. Así, por ejemplo, una fístula podría conectar dos partes del intestino, o el intestino con otro órgano como la vagina, la vejiga o la piel. Se estima que alrededor de una de cada cuatro personas con enfermedad de Crohn desarrollará una fístula en algún momento.
De hecho, cuanto más tiempo lleva una persona con crohn, más probabilidades tiene de que aparezcan fístulas. Por otro lado, los casos de fístulas en colitis ulcerosa son mucho menos comunes y solo se dan en una de cada 35 personas.
Aunque las fístulas están asociadas con la enfermedad inflamatoria intestinal, pueden aparecer muchos años después del diagnóstico. Las fístulas pueden disminuir considerablemente la calidad de vida de las personas que la sufren, quienes, con frecuencia, necesitan tratarlas con una combinación de tratamiento médico y quirúrgico.
- Tipos de fístulas Existen varios tipos diferentes de fístulas;
- Los asociados con la enfermedad de Crohn son: – Las fístulas anales (también conocidas como fístulas perianales) conectan el canal anal (pasaje posterior) a la superficie de la piel cerca del ano;
Este es el tipo de fístula más común y suelen aparecer después de un absceso (una acumulación localizada de pus resultado de la respuesta defensiva del organismo a una infección) alrededor del pasaje posterior. – Fístulas del intestino a la vejiga (también llamada enterovesical) – Fístulas del intestino a la vagina (también llamadas fístulas rectovaginales) – Fístulas del intestino a la piel (también llamadas fístulas enterocutáneas).
- Estas se dan en otras áreas que no sean el ano, más comúnmente en el abdomen;
- A menudo se desarrollan después de la cirugía, a lo largo de la línea de la incisión, pero ocasionalmente aparecen en personas con enfermedad de Crohn incluso cuando no se ha realizado la cirugía;
La fuga del contenido del intestino puede dañar la piel. – Fístulas de una parte del intestino a otra parte del intestino (también llamadas fístulas enteroentéricas o enterocólicas) Fístulas anales Dentro de las fístulas anales existen varios tipos. Para entender mejor las diferencias entre ellas, es importante comprender primero cual es la estructura de los esfínteres anales.
Los esfínteres son dos músculos en forma de cilindro que ayudan a controlar cuando se abre y se cierra el ano: – El esfínter anal interno es un músculo liso cuya acción es involuntaria, no se puede controlar mentalmente, que evita que el líquido y el gas escapen de forma inesperada.
– El esfínter anal externo envuelve el esfínter interno. Es un músculo que se relaja voluntariamente para dejar pasar el aire y se puede apretar cuando, por ejemplo, se siente la necesidad de hacerlo para ir al baño pero no hay cerca ninguno. Existen varios tipos de fístulas anales, con una variedad de nombres dependiendo de dónde están y si involucran a los esfínteres externos o internos: – Las fístulas simples por lo general se presentan por debajo de los músculos del esfínter y solo tienen un pasadizo.
– Las fístulas complejas involucran los músculos del esfínter y pueden tener varias interconexiones o pasadizos. También pueden estar asociadas con abscesos o pueden conectarse con la vejiga y la vagina.
Causas de las fístulas Las fístulas tienden a aparecer con la enfermedad de Crohn ya que el tipo de inflamación común en esta patología puede extenderse a través de todo el grosor de la pared intestinal. Cuando sucede, puede causar pequeñas fugas y también la formación de abscesos.
- Si se desarrolla un absceso, puede crear un agujero con posibilidad de acabar convirtiéndose en un pasaje o canal que une una parte del intestino con otra parte del cuerpo;
- Si el absceso estalla, el pus puede drenar, pero el pasaje o canal puede permanecer como una fístula;
Las fístulas son mucho más raras en la colitis ulcerosa porque la inflamación en la enfermedad se esparce a través de todo el espesor del intestino. Aunque las causas no se entienden completamente, los estudios han sugerido que ciertos genes y las bacterias intestinales pueden jugar un papel en el desarrollo de fístulas y que fibroblastos (células involucradas en la curación) pueden no funcionar como deberían en personas con enfermedad de Crohn.
Síntomas de una fístula Los síntomas dependen de la ubicación de la fístula. Fístulas anales El primer signo puede ser una hinchazón sensible o un bulto en el área circundante al ano, seguido de dolor e irritación que empeora al sentarse, moverse, defecar o toser.
Por la abertura de la fístula se puede dar una secreción de pus, heces o sangre. Fístulas vesicales Los síntomas incluyen la expulsión de aire, pus o heces en la orina, y más raramente fuga de orina por el recto. También se puede experimentar una necesidad frecuente de orinar e infecciones urinarias.
Fístulas vaginales Los síntomas incluyen dolor (que varía de leve a severo, dependiendo de la situación, el tamaño y la ubicación de la fístula) y el paso de aire, heces o pus a través de la fístula a la vagina.
También se puede presentar dolor durante las relaciones sexuales. Fístulas del intestino a la piel (enterocutáneas) Los síntomas incluyen filtraciones desde el intestino a través de la piel, lo que puede conducir a la deshidratación, diarrea, desnutrición y desequilibrios de electrolitos (incluyendo cambios en los niveles de sodio, potasio, calcio y magnesio).
Fístulas intestinales (enteroentéricas o enterocólicas) Los síntomas dependen de la extensión del intestino afectado y la ubicación de los dos extremos de la fístula. Donde sólo un segmento corto del intestino es desviado por la fístula, las personas pueden tener sin síntomas, pero cuando se trata de un segmento grande, las personas pueden experimentar diarrea, problemas de absorción de nutrientes y deshidratación.
Fuente: Crohn & Colitis UK Tags: Crohn , Enfermedad Inflamatoria Intestinal , fístulas , fístula , piel , Síntomas de una fístula , Causas de las fístulas , fístulas enteroentéricas , fístulas enterocutáneas , fístulas rectovaginales , qué es una fístula , vagina , absceso , fístulas anales , fístulas perianales , enterovesical Última actualización 27/08/2019.
¿Cuántos tipos de fístulas hay?
Completas (tienen aberturas tanto adentro como afuera del cuerpo) En herradura (conectan el ano a la superficie de la piel después de circundar el recto) Incompletas (un tubo desde la piel cerrado en su interior y que no conecta con ninguna estructura interna).
¿Cuánto dura la cirugía de fístula perianal?
Duración de la operación de una fístula anal – La operación dura en torno a 30-90 minutos , y el paciente suele irse a casa tras la misma, aunque es recomendable el ingreso hospitalario de 1 día. El dolor desaparece poco a poco tras la operación, conforme las heridas van cicatrizando.
¿Qué remedio casero es bueno para la fístula?
¿Qué antibiotico tomar para un absceso perianal?
¿Qué tratamiento es adecuado para la enfermedad perianal? – Dependiendo de la enfermedad perianal y del propio paciente, el tratamiento recomendado será diferente, siendo necesario siempre un tratamiento individualizado y generalmente multidisciplinar, en función de la asociación o no de afectación inflamatoria intestinal, así como la asociación de drenaje quirúrgico en el caso de abscesos perianales o fistulosos asociados.
- Antibióticos : El antibiótico es una sustancia química que impide el crecimiento de determinados microorganismos, principalmente bacterias intestinales responsables de la infección local presente en la región perianal. En el tratamiento de la EPA, los antibióticos más utilizados son el Metronidazol y el Ciprofloxacino , en combinación o por separado. La mejoría suele ocurrir de media a las 6-8 semanas. Una de las consecuencias del uso prolongado de antibióticos, puede asociarse con presencia de hormigueo o pérdida de sensibilidad en la zona, y con la reaparición de la enfermedad perianal tras la suspensión del mismo, siendo por lo general necesario el uso de fármacos inmunosupresores o biológicos
- Inmunosupresores : Son agentes químicos que producen alteraciones a nivel del sistema inmune con el objetivo de controlar la respuesta inflamatoria que causa la enfermedad perianal. Suelen recomendarse en aquellos casos en los que el tratamiento con antibióticos no es efectivo, cuando la EPA reaparece frecuentemente o si el paciente presenta fístulas complejas. Entre los más frecuentes podemos encontrar: Azatioprina (IMUREL) o Mercaptopurina.
Algunos de los fármacos empleados en el tratamiento de la enfermedad intestinal, como los aminosalicilatos o los corticoides, no son efectivos en el tratamiento de la enfermedad perianal. Tratamiento médico de la enfermedad perianal La enfermedad perianal suele precisar tratamiento con antibióticos, con tratamientos imnunosupresores y con terapia biológica.
Muchas veces se asocian con el tratamiento antibiótico, ya que su efecto en líneas generales puede tardar hasta 3 meses en observarse. Si el paciente responde a esta medicación, pueden utilizarse de manera indefinida.
- Fármacos anti-TNF : Infliximab (Remicade) y Adalimumab (Humira). Su aparición supuso un gran cambio en el tratamiento de la enfermedad perianal, dada su mayor eficacia respecto al resto de tratamientos convencionales. Básicamente, consisten en proteínas generadas por células del sistema inmune que se unen específicamente al TNF-α (proteína liberada por células del sistema inmune y que participa activamente en la potenciación de la respuesta inflamatoria), bloqueando su acción favoreciendo la reducción y desaparición de la inflamación.
Están indicados en pacientes con EC con fístulas de la pared abdominal y en la región perianal que no responden al tratamiento con antibióticos u otros inmunomoduladores. El Infliximab, suele administrarse por perfusión intravenosa de manera periódica (cada 8 semanas).
El Adalimumab se administra por vía subcutánea cada 2 semanas, pudiendo ser administradas por el mismo paciente en su domicilio.
- Otros fármacos biológicos, como Ustekinumab o Vedolizumab, pueden emplearse en caso de refractariedad o pérdida de efecto a fármacos antiTNF, si bien el nivel de evidencia actual de estos fármacos para el tratamiento de la enfermedad perianal, por el momento es bajo.
En caso de no responder a este tratamiento su médico puede ofrecerle otras alternativas, en general no indicadas como primera elección, como Metrotexato, Ciclosporina o Tacrolimus. Tratamiento quirúrgico de la enfermedad perianal El tratamiento quirúrgico en la EPA ha de ser siempre individualizado y valorado conjuntamente entre el gastroenterólogo, el cirujano y el propio paciente, teniendo en cuenta varios factores (tipo de lesión, gravedad de la lesión, la presencia de diferentes lesiones al mismo tiempo y las repercusiones de la cirugía en la evolución de dichas lesiones y en la calidad de vida del paciente).
Indicaciones para el tratamiento quirúrgico | ||
Tipo de lesión | Con proctitis | Sin proctitis |
Pliegues cutáneos | No operar | Operar sólo si dificulta la higiene |
Fisura anal | No operar | Operar en casos concretos |
Abscesos | Drenaje | Drenaje |
Estenosis | Dilatación digital | Dilatación digital |
Fístula simple | Sedal (Setón) | Fistulotomía |
Fístula compleja | Sedal (Setón) | Colgajo endorrectal |
Fístula recto-vaginal | Si hay absceso: Sedal (Setón) Ileostomía | Colgajo cutáneo, rectal o vaginal |
Sepsis perianal | Ileostomía o Proctectomía | Estoma y tratamiento de fístulas |
Pliegues cutáneos Los pliegues cutáneos o colgajos cutáneos perianales son lesiones frecuentes en la EC resltuado de la expresión de procesos inflamatorios l ocales pr evios. Su tamaño puede variar en función de la actividad de la enfermedad. Rara vez necesitan ser extirpados mediante cirugía ya que en la mayor parte de los casos son asintomáticos. Sin embargo, si son grandes y numerosos pueden dificultar la higiene de la zona y provocar una mayor irritación perianal recoméndando se su extirpación mediante anestesia local.
Se elige en función del tipo de lesión perianal, de la sintomatología y de si existe o no inflamación del recto (proctitis) asociada. Puede dividirse a grandes rasgos en una cirugía local más o menos complicada para el tratamiento específico de las lesiones perianales y, una cirugía mayor o radical, mucho menos frecuente y reservada para casos graves de enfermedad perianal.
En caso de que la enfermedad esté activa, no deben ser extirpados, ya que el riesgo de reaparición es mayor y su correcta curación puede verse retrasada y dificultada. Abscesos En este tipo de lesiones se recomienda realizar cuanto antes un drenaje quirúrgico, eliminando una pequeña porción de piel mediante la realización de una incisión simple.
De este modo se alivia el dolor evitando la progresión del absceso y la posible aparición de fístulas. En aquellos casos en los que el absceso sea de gran tamaño, se puede colocar una sonda en el mismo, para facilitar el drenaje o la irrigación (limpieza).
Además del drenaje, es necesario administrar simultáneamente tratamiento antibiótico. Fístulas Antes de proceder con cualquier tratamiento quirúrgico de las fístulas, es necesario evaluar la actividad de la enfermedad intestinal y la afectación rectal mediante ileocolonoscopia, completando los estudios en muchas ocasiones con resonancia pélvica o ecoendoscopia, teniendo en cuenta que la mayoría de las fístulas asociadas a la enfermedad inflamatoria intestinal son fístulas complejas. Hay que tener muy claro la estrategia terapéutica a seguir en el tratamiento de la enfermedad fistulizante que siempre conlleva un manejo multidisciplinar (gastroenterólogo, cirujano y radiólogo). Las fístulas pueden ser simples o complejas: – Fístulas simples: Suelen localizarse en el canal anal bajo y presentar un único orificio externo. La técnica quirúrgica recomendada en estos casos suele ser la apertura de la fístula, lo que se denomina fistulotomía. En aquellos casos en los que existiera proctitis o incontinencia, puede colocarse un sedal (también conocido como setón) a lo largo de la fístula para favorecer el drenaje de la misma. – Fístulas complejas Las fístulas complejas se localizan en el canal anal medio o alto, pueden presentar múltiples orificios externos y asociarse con dolor o fluctuación y estenosis anal, aumentando el riesgo de padecer complicaciones sépticas e incontinencia anal asociadas.
No suelen asociarse con dolor o fluctuación y generalmente son superficiales y por lo tanto, menos peligrosas. Dentro de las fístulas complejas se encuentran también las fístulas recto-vaginales. En las fistulas complejas asociadas a la enfermedad inflamatoria intestinal se recomienda no realizar técnicas quirúrgicas muy agresivas hasta que la inflamación intestinal y la inflamación perianal estén controlados.
Está muy extendida en la actualidad la colocación de setones de drenaje que facilitan el drenaje de la fístula para evitar la abscesificación del trayecto o la formación de abscesos relacionados con la dificultad de drenaje del trayecto fistuloso. Junto al drenaje quirúrgico está indicado asociar tratamiento médico mediante inmunomoduladores o fármacos biológicos.
- De hecho la utilización de tratamientos biológicos o fármacos anti-TNF en la enfermedad fistulizante perianal compleja ha constituido el gran cambio en el tratamiento de estas afecciones con un mejor control de la enfermedad y un incremento de la calidad de vida del paciente;
En casos de enfermedad perianal refractaria o sepsis perianal (respuesta inflamatoria frente a una infección grave) no controlada puede ser necesario realizar una ostomía temporal para facilitar el control de la enfermedad o una proctectomía radical en casos muy avanzados y refractarios (que no responden bien a los diferentes tipos de tratamientos). Estenosis anal Si existe dificultad para evacuar por estrechamiento del esfínter anal, ésta puede solucionarse mediante la dilatación digital del mismo (introducción de dos dedos pulgares en el orificio anal, que se irán separando progresivamente hasta conseguir una dilatación adecuada del esfínter). Si la estenosis es más compleja (la zona de estrechamiento abarca más que el esfínter, existen fístulas asociadas o inflamación rectal grave) puede ser necesaria la proctectomía. Incontinencia fecal En caso de que sea debida a la enfermedad de Crohn y muy condicionante , lo más indicado es la proctectomía. Hemorroides internas El tratamiento tópico con pomadas o esteroides suele ser bastante efectivo y suficiente. Sin embargo, si producen sangrado rectal (rectorragia), puede estar indicada la realización de cirugía. Tratamiento con células madre de la enfermedad fistulizante perianal El pasado 14 de diciembre de 2017, el Comité de Medicamentos de Uso Humano (CHMP) de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) formuló una opinión positiva recomendando la autorización de comercialización del medicamento darvadstrocel (Alifosel®; Tigenix NV/Takeda) para el tratamiento de las fístulas complejas de la enfermedad de Crohn. La recomendación positiva de la EMA se basa en los resultados del ensayo clínico Fase III (ADMIRE-CD) en el que se demostraba la eficacia y seguridad de este tratamiento para los pacientes con fístulas perianales complejas de la enfermedad de Crohn. En el estudio se demostró la remisión de las fístulas en el 50% de los pacientes que habían recibido las células madre a las 26 semanas, frente a un 34% de los pacientes a los que se había realizado solo una limpieza quirúrgica de la fístula.
¿Cuál es la mejor crema para las fisuras anales?
Tratamientos no quirúrgicos – El médico puede recomendar:
- Nitroglicerina de aplicación externa (Rectiv), para ayudar a aumentar el flujo sanguíneo hacia la fisura, promover la cicatrización y ayudar a relajar el esfínter anal. La nitroglicerina suele considerarse la mejor opción de tratamiento médico cuando las demás medidas no brindan resultados. Entre los efectos secundarios se incluyen cefalea, que puede ser intensa.
- Cremas anestésicas tópicas , como lidocaína clorhidrato (Xylocaine), que puede ayudar en el alivio del dolor.
- Inyección de toxina botulínica tipo A (Botox), para paralizar el músculo del esfínter anal y relajar los espasmos.
- Medicamentos para la presión arterial , por ejemplo nifedipina (Procardia) o diltiazem (Cardizem) oral, que pueden ayudar a relajar el esfínter anal. Estos medicamentos se pueden tomar por vía oral o se pueden aplicar de forma externa, y se pueden utilizar cuando la nitroglicerina no brinda resultados o provoca efectos secundarios de consideración.
¿Cómo es la operación de una fístula?
¿En qué consiste? – La cirugía de fístula anal se realiza bajo anestesia general. Hay diferentes procedimientos disponibles y el más adecuado dependerá de casos individuales.
- Fistulotomía
La fistulotomía implica abrir la fístula a través de una incisión para que sane como si fuera una cicatriz plana normal. Es el tipo de cirugía más común y representa la mejor opción de tratamiento para las fístulas que no cruzan el esfínter. En cambio, si lo atraviesa aumenta el riesgo de incontinencia, lo que hace preferibles otros procedimientos.
- Técnicas con cerdas
Una cerda es un segmento de hilo quirúrgico que se puede insertar en la fístula para mantenerla abierta. Se pueden usar para mantener la fístula abierta durante varias semanas, dejándola tiempo para drenar y sanar, evitando así la necesidad de hacer incisiones. El procedimiento, si bien permite que la fístula sane, no cura la afección. Para curar la fístula, puede ser necesario insertar más cerdas, que sean incluso más estrechas, con el objetivo de cortarla gradualmente.
- Procedimiento avanzado de colgajo
Implica cubrir la porción de fístula que ingresa al intestino con un colgajo de tejido tomado del recto. El procedimiento evita cortar los músculos alrededor del esfínter anal.
¿Cómo se produce la fístula?
Es una conexión anormal entre dos partes del cuerpo, como un órgano o un vaso sanguíneo y otra estructura. Generalmente, las fístulas son el producto de una lesión o cirugía. Las infecciones o inflamaciones también pueden provocar que se forme una fístula. Se pueden formar entre:
- Una arteria y una vena
- Las vías biliares y la superficie de la piel (a causa de una cirugía en la vesícula biliar)
- El cuello uterino y la vagina
- El cuello y la garganta
- El espacio intracraneal y un seno paranasal
- Los intestinos y la vagina
- El colon y la superficie del cuerpo, lo que provoca que las heces salgan a través de un orificio diferente al ano
- El estómago y la superficie cutánea
- El útero y la cavidad peritoneal (el espacio entre las paredes del abdomen y los órganos internos)
- Una arteria y una vena en los pulmones (provoca que la sangre no obtenga suficiente oxígeno en los pulmones)
- El ombligo y los intestinos
La enfermedad intestinal inflamatoria, como la colitis ulcerativa o la enfermedad de Crohn, puede conducir a la formación de fístulas entre dos asas intestinales. Asimismo, una lesión puede llevar a la formación de fístulas entre arterias y venas. Los tipos de fístulas incluyen:
- Ciegas (están abiertas en un solo extremo, pero conectan a dos estructuras)
- Completas (tienen aberturas tanto adentro como afuera del cuerpo)
- En herradura (conectan el ano a la superficie de la piel después de circundar el recto)
- Incompletas (un tubo desde la piel cerrado en su interior y que no conecta con ninguna estructura interna)
De Prisco G, Celinski S, Spak CW. Abdominal abscesses and gastrointestinal fistulas. In: Feldman M, Friedman LS, Brandt LJ, eds. Sleisenger & Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease. 11th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2021:chap 29. Lentz GM, Fialkow M. Anal incontinence: diagnosis and management.
- Las fístulas se pueden presentar en muchas partes del cuerpo;
- In: Gershenson DM, Lentz GM, Valea FA, Lobo RA, eds;
- Comprehensive Gynecology;
- 8th ed;
- Philadelphia, PA: Elsevier;2022:chap 22;
- Taber’s Cyclopedic Medical Dictionary;
24th ed. Davis Company; 2021 www. tabers. com/tabersonline. Accessed April 5, 2022. Versión en inglés revisada por: Linda J. Vorvick, MD, Clinical Associate Professor, Department of Family Medicine, UW Medicine, School of Medicine, University of Washington, Seattle, WA.
¿Por qué se da la fístula perianal?
Descripción general – Una fístula anal es el término médico para un túnel infectado que se desarrolla entre la piel y la abertura muscular al final del tubo digestivo (ano). La mayoría de las fistulas anales son el resultado de una infección que comienza en la glándula anal.
Esta infección causa un absceso que drena espontáneamente o debe drenarse quirúrgicamente a través de la piel cerca del ano. Luego, la fístula forma un túnel bajo la piel y se conecta con la glándula infectada.
Generalmente es necesario realizar una cirugía para tratar una fístula anal.
¿Qué antibiotico tomar para un absceso perianal?
¿Qué tratamiento es adecuado para la enfermedad perianal? – Dependiendo de la enfermedad perianal y del propio paciente, el tratamiento recomendado será diferente, siendo necesario siempre un tratamiento individualizado y generalmente multidisciplinar, en función de la asociación o no de afectación inflamatoria intestinal, así como la asociación de drenaje quirúrgico en el caso de abscesos perianales o fistulosos asociados.
- Antibióticos : El antibiótico es una sustancia química que impide el crecimiento de determinados microorganismos, principalmente bacterias intestinales responsables de la infección local presente en la región perianal. En el tratamiento de la EPA, los antibióticos más utilizados son el Metronidazol y el Ciprofloxacino , en combinación o por separado. La mejoría suele ocurrir de media a las 6-8 semanas. Una de las consecuencias del uso prolongado de antibióticos, puede asociarse con presencia de hormigueo o pérdida de sensibilidad en la zona, y con la reaparición de la enfermedad perianal tras la suspensión del mismo, siendo por lo general necesario el uso de fármacos inmunosupresores o biológicos
- Inmunosupresores : Son agentes químicos que producen alteraciones a nivel del sistema inmune con el objetivo de controlar la respuesta inflamatoria que causa la enfermedad perianal. Suelen recomendarse en aquellos casos en los que el tratamiento con antibióticos no es efectivo, cuando la EPA reaparece frecuentemente o si el paciente presenta fístulas complejas. Entre los más frecuentes podemos encontrar: Azatioprina (IMUREL) o Mercaptopurina.
Algunos de los fármacos empleados en el tratamiento de la enfermedad intestinal, como los aminosalicilatos o los corticoides, no son efectivos en el tratamiento de la enfermedad perianal. Tratamiento médico de la enfermedad perianal La enfermedad perianal suele precisar tratamiento con antibióticos, con tratamientos imnunosupresores y con terapia biológica.
Muchas veces se asocian con el tratamiento antibiótico, ya que su efecto en líneas generales puede tardar hasta 3 meses en observarse. Si el paciente responde a esta medicación, pueden utilizarse de manera indefinida.
- Fármacos anti-TNF : Infliximab (Remicade) y Adalimumab (Humira). Su aparición supuso un gran cambio en el tratamiento de la enfermedad perianal, dada su mayor eficacia respecto al resto de tratamientos convencionales. Básicamente, consisten en proteínas generadas por células del sistema inmune que se unen específicamente al TNF-α (proteína liberada por células del sistema inmune y que participa activamente en la potenciación de la respuesta inflamatoria), bloqueando su acción favoreciendo la reducción y desaparición de la inflamación.
- Están indicados en pacientes con EC con fístulas de la pared abdominal y en la región perianal que no responden al tratamiento con antibióticos u otros inmunomoduladores;
- El Infliximab, suele administrarse por perfusión intravenosa de manera periódica (cada 8 semanas);
El Adalimumab se administra por vía subcutánea cada 2 semanas, pudiendo ser administradas por el mismo paciente en su domicilio.
- Otros fármacos biológicos, como Ustekinumab o Vedolizumab, pueden emplearse en caso de refractariedad o pérdida de efecto a fármacos antiTNF, si bien el nivel de evidencia actual de estos fármacos para el tratamiento de la enfermedad perianal, por el momento es bajo.
En caso de no responder a este tratamiento su médico puede ofrecerle otras alternativas, en general no indicadas como primera elección, como Metrotexato, Ciclosporina o Tacrolimus. Tratamiento quirúrgico de la enfermedad perianal El tratamiento quirúrgico en la EPA ha de ser siempre individualizado y valorado conjuntamente entre el gastroenterólogo, el cirujano y el propio paciente, teniendo en cuenta varios factores (tipo de lesión, gravedad de la lesión, la presencia de diferentes lesiones al mismo tiempo y las repercusiones de la cirugía en la evolución de dichas lesiones y en la calidad de vida del paciente).
Indicaciones para el tratamiento quirúrgico | ||
Tipo de lesión | Con proctitis | Sin proctitis |
Pliegues cutáneos | No operar | Operar sólo si dificulta la higiene |
Fisura anal | No operar | Operar en casos concretos |
Abscesos | Drenaje | Drenaje |
Estenosis | Dilatación digital | Dilatación digital |
Fístula simple | Sedal (Setón) | Fistulotomía |
Fístula compleja | Sedal (Setón) | Colgajo endorrectal |
Fístula recto-vaginal | Si hay absceso: Sedal (Setón) Ileostomía | Colgajo cutáneo, rectal o vaginal |
Sepsis perianal | Ileostomía o Proctectomía | Estoma y tratamiento de fístulas |
Pliegues cutáneos Los pliegues cutáneos o colgajos cutáneos perianales son lesiones frecuentes en la EC resltuado de la expresión de procesos inflamatorios l ocales pr evios. Su tamaño puede variar en función de la actividad de la enfermedad. Rara vez necesitan ser extirpados mediante cirugía ya que en la mayor parte de los casos son asintomáticos. Sin embargo, si son grandes y numerosos pueden dificultar la higiene de la zona y provocar una mayor irritación perianal recoméndando se su extirpación mediante anestesia local.
Se elige en función del tipo de lesión perianal, de la sintomatología y de si existe o no inflamación del recto (proctitis) asociada. Puede dividirse a grandes rasgos en una cirugía local más o menos complicada para el tratamiento específico de las lesiones perianales y, una cirugía mayor o radical, mucho menos frecuente y reservada para casos graves de enfermedad perianal.
En caso de que la enfermedad esté activa, no deben ser extirpados, ya que el riesgo de reaparición es mayor y su correcta curación puede verse retrasada y dificultada. Abscesos En este tipo de lesiones se recomienda realizar cuanto antes un drenaje quirúrgico, eliminando una pequeña porción de piel mediante la realización de una incisión simple.
De este modo se alivia el dolor evitando la progresión del absceso y la posible aparición de fístulas. En aquellos casos en los que el absceso sea de gran tamaño, se puede colocar una sonda en el mismo, para facilitar el drenaje o la irrigación (limpieza).
Además del drenaje, es necesario administrar simultáneamente tratamiento antibiótico. Fístulas Antes de proceder con cualquier tratamiento quirúrgico de las fístulas, es necesario evaluar la actividad de la enfermedad intestinal y la afectación rectal mediante ileocolonoscopia, completando los estudios en muchas ocasiones con resonancia pélvica o ecoendoscopia, teniendo en cuenta que la mayoría de las fístulas asociadas a la enfermedad inflamatoria intestinal son fístulas complejas. Hay que tener muy claro la estrategia terapéutica a seguir en el tratamiento de la enfermedad fistulizante que siempre conlleva un manejo multidisciplinar (gastroenterólogo, cirujano y radiólogo). Las fístulas pueden ser simples o complejas: – Fístulas simples: Suelen localizarse en el canal anal bajo y presentar un único orificio externo. La técnica quirúrgica recomendada en estos casos suele ser la apertura de la fístula, lo que se denomina fistulotomía. En aquellos casos en los que existiera proctitis o incontinencia, puede colocarse un sedal (también conocido como setón) a lo largo de la fístula para favorecer el drenaje de la misma. – Fístulas complejas Las fístulas complejas se localizan en el canal anal medio o alto, pueden presentar múltiples orificios externos y asociarse con dolor o fluctuación y estenosis anal, aumentando el riesgo de padecer complicaciones sépticas e incontinencia anal asociadas.
- No suelen asociarse con dolor o fluctuación y generalmente son superficiales y por lo tanto, menos peligrosas;
- Dentro de las fístulas complejas se encuentran también las fístulas recto-vaginales;
- En las fistulas complejas asociadas a la enfermedad inflamatoria intestinal se recomienda no realizar técnicas quirúrgicas muy agresivas hasta que la inflamación intestinal y la inflamación perianal estén controlados;
Está muy extendida en la actualidad la colocación de setones de drenaje que facilitan el drenaje de la fístula para evitar la abscesificación del trayecto o la formación de abscesos relacionados con la dificultad de drenaje del trayecto fistuloso. Junto al drenaje quirúrgico está indicado asociar tratamiento médico mediante inmunomoduladores o fármacos biológicos.
De hecho la utilización de tratamientos biológicos o fármacos anti-TNF en la enfermedad fistulizante perianal compleja ha constituido el gran cambio en el tratamiento de estas afecciones con un mejor control de la enfermedad y un incremento de la calidad de vida del paciente.
En casos de enfermedad perianal refractaria o sepsis perianal (respuesta inflamatoria frente a una infección grave) no controlada puede ser necesario realizar una ostomía temporal para facilitar el control de la enfermedad o una proctectomía radical en casos muy avanzados y refractarios (que no responden bien a los diferentes tipos de tratamientos). Estenosis anal Si existe dificultad para evacuar por estrechamiento del esfínter anal, ésta puede solucionarse mediante la dilatación digital del mismo (introducción de dos dedos pulgares en el orificio anal, que se irán separando progresivamente hasta conseguir una dilatación adecuada del esfínter). Si la estenosis es más compleja (la zona de estrechamiento abarca más que el esfínter, existen fístulas asociadas o inflamación rectal grave) puede ser necesaria la proctectomía. Incontinencia fecal En caso de que sea debida a la enfermedad de Crohn y muy condicionante , lo más indicado es la proctectomía. Hemorroides internas El tratamiento tópico con pomadas o esteroides suele ser bastante efectivo y suficiente. Sin embargo, si producen sangrado rectal (rectorragia), puede estar indicada la realización de cirugía. Tratamiento con células madre de la enfermedad fistulizante perianal El pasado 14 de diciembre de 2017, el Comité de Medicamentos de Uso Humano (CHMP) de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) formuló una opinión positiva recomendando la autorización de comercialización del medicamento darvadstrocel (Alifosel®; Tigenix NV/Takeda) para el tratamiento de las fístulas complejas de la enfermedad de Crohn. La recomendación positiva de la EMA se basa en los resultados del ensayo clínico Fase III (ADMIRE-CD) en el que se demostraba la eficacia y seguridad de este tratamiento para los pacientes con fístulas perianales complejas de la enfermedad de Crohn. En el estudio se demostró la remisión de las fístulas en el 50% de los pacientes que habían recibido las células madre a las 26 semanas, frente a un 34% de los pacientes a los que se había realizado solo una limpieza quirúrgica de la fístula.